lunes, 13 de mayo de 2019

CASCOS HOWARD LEIGHT IMPACT SPORT

Hace unas semanas recibí en casa un paquete muy especial. Un paquete que contenía material de Ardesa, concretamente una carrillera para poner en el rifle de Hornady que probaré muy muy pronto, y lo que nos va a ocupar en la presente entrada, los cascos Impact Sport de Howard Leight. 


Llevaba mucho tiempo detrás de un dispositivo que protegiera mis oídos, pues por muchos es ya sabido, que las detonaciones de rifles y escopetas terminan produciendo una perdida de audición en los cazadores. Los Impact Sport de Howard Leight son unos cascos que ya no sólo cubren esta necesidad, sino que además sirven para incrementar los sonidos ambiente, facilitando y haciendo más interactivo el mundo que nos rodea, cerrándose y protegiendo los mismo cuando se producen sonidos muy fuertes.




La verdad es que me llegaron justo a tiempo pues, al día siguiente de su recepción, iba a tener la suerte de poder probarlos en el campo en un rececho, y me dispuse a abrirlos para familiarizarme con ellos. 



La verdad es que la primera impresión fue muy positiva, al tacto y en imagen desprenden buenas calidades, son muy ergonómicos y se adaptan bien a la cabeza, y no dan sensación de incomodez sobre los oídos. 

Me decido a probarlos, con lo que les pongo las pilas, que por cierto vienen incluidas. Me vuelve a llamar la atención lo fáciles que son de usar, tienen una única ruleta que sirve para subir y bajar el volumen y apagar. Con lo que no es necesario estudiar mucho o nada para su utilización. 

Me los ajusto y los enciendo. FLIPO. Me doy cuenta que mi capacidad auditiva es muy pobre en el momento en el que me los pongo. Para empezar el ruido de la cascada del acuario de casa que no deja de ser un ruido tenue pasa a parecer al de una chorrera natural y hasta los más ligeros ruidos se convierten en una percención perfecta. La nitidez de captación y de volumen es impresionante.



Sin más decido prepararlos para el día siguiente y probarlos en el rececho. Por supuesto previamente a mi keko de playmocaza le pongo los suyos también jaja



Llega el día siguiente y con él, el rececho. Un rececho maravilloso y satisfactorio por la sierra de Madrid donde disfrutamos de un día de calor y de un lugar idílico. Sin entrar en detalles sobre el rececho pues en no mucho tiempo podré mostraros el mismo en documental, me vuelvo a centrar en los cascos. 

Si en casa ya me parecieron buenos en el campo la experiencia es maravillosa. Con ellos puedes oir hasta el último trino de pájaro, el monte moverse, y poder prestar más atención a los sonidos que nos rodean. De hecho pude escuchar una ladra de corzo que ningún otro del grupo pudo escuchar lo que da una buena ventaja. El rececho fue de unas dos horas y durante las mismas no sentí en ningún momento incomodidad por su utilización, ni de calor ni de ningún tipo, casi casi se puede decir que es como si no llevaras nada. En cuanto a bloquear sonidos fuertes, a la hora del lance, con tres disparos, sentí a la perfección como se cerraban protegiéndome del sonido, y a posteriori que realizamos algunos tiros más lo mismo. Ni pitidos, sin sensación de malestar en los timpanos. Nada. 



En fin estoy super contentos con ellos, ya son parte de mi equipo, y ya ardo en deseos de probarlos de noche en espera pues a buen seguro sé que con ellos voy a disfrutar de lo lindo. 


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